La limpieza dental y raspado son tratamientos que se realizan para el beneficio de la salud bucal. La limpieza dentales un tratamiento preventivo cuyo objetivo es eliminar el sarro de los dientes.
Es habitual que se nos adhiera placa bacteriana sobre las piezas dentales, pero normalmente, la mayoría se elimina con el cepillado y el uso del hilo dental. No obstante, cualquier placa restante que no sea eliminada, se endurecerá y se convertirá en sarro.
Esto hace que aparezca una superficie rugosa que facilita que las bacterias se adhieran y dañen los dientes y las encías. En este caso, el sarro no es posible eliminarlo solo con el cepillado de dientes habitual.
La limpieza dental se efectúa sobre la superficie de los dientes. Cuando las bacterias y el sarro se encuentran entre las encías y las raíces de los dientes se realiza el raspado dental.
Razones para hacer un raspado de diente
- Prevención de enfermedades periodontales
Los raspados dentales son vitales para prevenir y tratar enfermedades periodontales, como son la gingivitis y la periodontitis. Estas afecciones pueden provocar inflamación de las encías, pérdida de hueso y, en casos más graves, la pérdida de dientes.
- Eliminación de placa y sarro
Aunque se mantenga una rutina de higiene bucal, la placa y el sarro pueden acumularse con el transcurso del tiempo. Los raspados dentales permiten la eliminación profunda de estas acumulaciones, y evitan problemas a largo plazo.
- Mejora de la estética dental
Al quitar manchas y acumulaciones que son antiestéticas, los raspados dentales mejoran la salud bucal, y también la estética dental.
Limpieza de dientes, ¿es lo mismo que el raspado?
Una limpieza de dientes se efectúa para eliminar el exceso de sarro. En ella, el odontólogo o el higienista dental, utiliza ultrasonidos que provocan la rotura del sarro para permitir su retirada.
Después de esto, se utilizará un cepillo de alta velocidad que eliminará las posibles manchas que puedan quedar. Este tratamiento deja los dientes libres de sarro y mejora las posibilidades de evitar la aparición de la enfermedad de las encías.
A diferencia de la limpieza normal, el raspado se efectúa cuando las bacterias y el sarro están en las encías de los dientes. El raspado es más invasivo.
Los raspados normalmente requieren que se use un anestésico local. Además, a veces, es necesario llevarlo a cabo en diferentes visitas para limitar el malestar del paciente.
La limpieza dental y raspado, ¿son dolorosos o causan molestias?
Se aplica anestesia local, esto es esencial, ya que si no se pusiera podría ser un procedimiento doloroso. Para limpiar las raíces de los dientes, las herramientas utilizadas deberán poder ir por debajo de la línea de las encías, entre la encía y la raíz del diente.
El tratamiento de raspado de la raíz puede ser desagradable, pero su realización es vital para cualquier persona cuyos problemas periodontales sean severos o avanzados.
Mantener una buena rutina de limpieza mediante el cepillado y el uso del hilo dental de forma frecuente, así como tener revisiones y limpiezas habitualmente, permitirá que el tratamiento sea más llevadero y que los intervalos de mantenimiento puedan alargarse, llevándose a cabo con menor frecuencia.
Cómo se hace un raspado dental
El raspado dental o limpieza profunda del sarro en las encías se conoce también como curetaje. Se debe a la herramienta que se utiliza para trabajar en la boca del paciente, que es una cureta.
La limpieza se efectúa mediante técnicas mecánicas combinadas con instrumental ultrasónico con distintos tipos de curetas, las cuales se adaptan al contorno de la raíz de cada diente y permiten extraer las acumulaciones de sarro (sin llegar a dañar las encías).
Para realizar un raspado dental, seguimos los siguientes pasos:
- Diagnóstico del problema. Lo primero será revisar el estado de la boca del paciente y determinar si el curetaje es la solución más idónea para su caso.
- Aplicación de anestesia local. Para que el raspado no cause molestias, la zona a tratar se adormece con anestesia local.
- Raspado. Utilizándose curetas y material de última generación para extraer la acumulación de bacterias de las encías. En ocasiones es necesario que el tratamiento se lleve a cabo en diferentes sesiones.
- Alisado radicular. El proceso terminará con un alisado radicular que mejorará el estado de la boca y evitará nuevas acumulaciones de depósitos de sarro en las encías.
- Seguimiento. Informamos a los pacientes sobre los cuidados después de un raspado dental para que se recuperen lo antes posible y con las mínimas molestias.
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